La competencia se llama Haka Pei y es de origen polinésico. En Rapa Nui o Isla de Pascua lo llaman «la prueba de valor más singular del mundo» y está dentro de las actividades de la fiesta Tapati.
Los espectadores se reúnen a los pies del cerro Maunga Pu’i, que se encuentra en el camino a la playa de Anakena. Los participantes se adornan con pinturas Takona y vestimenta tradicional, antes de ascender a la cima de esta loma, que tiene una altura de 200 metros y una inclinación de 45º.
Este arriesgado juego consiste en deslizarse ladera abajo, acostado sobre una especie de trineo rústico construido con dos troncos de plátanos unidos entre sí. A velocidades que a veces alcanzan los 80 km/h, los contendientes descienden a la base del cerro en menos de diez segundos. El ganador será aquel que consiga recorrer la mayor distancia en el menor tiempo posible.