Cuando se habla de música clásica, en general nos referimos al periodo ubicado entre los años 1750 y 1820 llamado “Clasicismo musical” el que nace como una forma de quiebre contra la estricta música del barroco que se caracteriza por una estructura horizontal donde varias melodías se sobreponen a la vez.
Una de las razones por las que se habla de Viena como la capital de la música clásica es que esta ciudad es la cuna de Joseph Haydn (que se destacó principalmente por la Sinfonía n 1 de Re Mayor) de Wolfgang Amadeus Mozart (Las bodas de Fígaro, Serenata No. 13, Flauta mágica) y Luidwig Van Beethoven (Sinfonía No. 5 en Do menor, Para Elisa, Sinfonía No. 9 en Re menor). Otros de los artistas que se dedicaron a componer en la capital austriaca fueron Antonio Vivaldi, los Strauss (padre e hijo), Franz Schubert, Richard Wagner, Johannes Brahms.
Los orígenes de Viena como capital de la música, viene de la casa real austríaca de los Habsburgo, que en su búsqueda por atraer a los más grandes compositores del continente, posicionaron la capital de su imperio como centro cultural de referencia. Esta familia real se dedicó a promover la música desde muy temprano, algunos de sus emperadores como Fernando III, Leopoldo I o José I fueron también importantes compositores.
Fuente Video YouTube: https://www.youtube.com/@LaGranVII